Los manzanos no dan peras
En la vida puede que te encuentres frente a un manzano con la esperanza de que un día te de peras y lo único que consigues es que la frustración aumente en ti. Esto es lo que ocurre cada vez que no aceptamos como es otra persona y queremos que sea o piense como nosotros/as, en ese momento estamos esperando peras. Esto no significa que estés de acuerdo con los comportamientos y pensamientos de las otras personas. Puede ser que tú veas muy claro que la otra persona está equivocada en algo y se lo digas, lo que no te ayudará es esperar que solo por decirselo cambie. Todos tenemos nuestros ritmos y momentos para hacer los cambios que necesitamos por lo que es necesario aceptar esto. En esto consiste la aceptación y el respeto a la otra persona. Por eso es necesario ver a quién tengo delante, cómo es su forma de actuar y sus tendencias personales. De esta forma podré pedirle a la otra persona cosas que me puede dar y no ofuscarme en que vea el mundo desde mis ojos. Para saber si eres una persona que está esperando peras ante el manzano plantéate las siguientes preguntas:
| ¿Te pones nervioso/a cuando le dices las cosas más de una vez a una persona y ves que no hace los cambios que tú esperas? | ¿Te interesas por conocer a la otra persona o con dos palabras ya crees conocerla y la juzgas? |
| ¿Escuchas atentamente el razonamiento de las otras personas o lo que esperas es que te den la razón directamente? | ¿Tiendes a aceptar a la otra persona e intentas ayudarle si te pide ayuda o te enredas en discusiones que no van a ningún lado porque no hace lo que tú crees que se debe hacer? |
| ¿Das por hecho que, si algo lo haces tú, ya lo puede hacer todo el mundo? | ¿Respetas los tiempos de las personas o te empeñas en tirar de ellas para que hagan o se comporten como tú crees que es correcto? |
Si has contestado que sí a alguna de las preguntas, estás esperando peras ante un manzano. Espero que esto te ayude a mejorar cosas en tu vida, que intentes conocer y aceptar los ritmos de cambio o las cosas que no pueden cambiar las personas, te frustrarás menos y las podrás ayudar mejor.
Jaume Bertrán
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